Claves para aproximarse al valor real del plástico: conocerlo, utilizarlo bien y reciclarlo
9 de diciembre de 2021 | Por: Biblox
Categorias:

El plástico ofrece un amplio abanico de ventajas. Resistencia a la temperatura, estabilidad a la luz y la posibilidad de uso en múltiples aplicaciones industriales y sectores económicos. Entre otros, la agricultura, la construcción, la automoción, la aeronáutica, el sanitario y la alimentación.
Conocer sus prestaciones, utilizarlo correctamente también al final de su vida útil e implementar un proceso de reciclaje adecuado. Son tres de las claves que permiten entender la gran aportación social e industrial del plástico.
Los materiales plásticos son altamente eficaces en la seguridad e higiene de las personas. Durante la pandemia nos han protegido del coronavirus gracias a los EPI, guantes o mascarillas.
Según datos de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), Europa solo pierde un 3% de alimentos gracias al uso de soluciones de envasados plásticos apropiados. Garantizan perfectamente la conservación de los alimentos y reduce su desperdicio que, en los países en vías de desarrollo, puede alcanzar el 40% porque no está generalizado el uso de envasados. Los envases plásticos que están en contacto con los alimentos son materiales sometidos al cumplimiento de normativas nacionales e internacionales. En la Unión Europea están regulados por el Reglamento (UE) Nº 10/2011 de la Comisión, de 14 de enero de 2011, sobre materiales y objetos plásticos destinados a entrar en contacto con alimentos.
En Biblox damos respuesta a estas necesidades de conservación de la calidad de los alimentos mediante el uso de envases de plástico técnico termoformado en base a politereftalato de etileno (PET) y Polipropileno principalmente, dado que aportan buenas propiedades estructurales, de transparencia, autolubricación, resistencia a temperatura, etc.
Estas prestaciones ayudan a conservar, presentar y transportar cualquier producto de forma segura y eficaz con bandejas de plástico recicladas y reciclables.
Además, la versatilidad, durabilidad y la ligereza del plástico permiten fabricar la solución a medida más adecuada para cada función y necesidad concreta.
Como recoge AIMPLAS, Instituto Tecnológico del Plástico, es la alternativa más sostenible en numerosas aplicaciones.
Implicación de todos y reciclado eficaz
Abandonar definitivamente todo tipo de plástico para cualquier uso no es una solución factible. La receta pasa por la responsabilidad de todos y facilitar y practicar una gestión eficaz de su reciclaje por parte de ciudadanía, empresas, administraciones públicas, empresas de reciclaje, etc.
Desde el año 2006, el reciclaje de residuos plásticos se ha duplicado en Europa, según datos de National Geographic. Sin embargo, España solo recupera el 25,4% de los envases de plástico. Cuando su reciclaje no sea viable puede ser utilizado como fuente de energía renovable por su alta capacidad calorífica. En consecuencia, bien gestionado contribuye a la economía circular.
Las cuatro fases básicas de reciclaje del plástico son:
- Depositar los envases en el contenedor correspondiente. En el de color amarillo debe introducirse los envases de plástico, metálicos, tetrabriks y bandejas de corcho.
- Recogida y traslado a planta de selección donde se clasifican por colores.
- El procesado de trituración y lavado posterior permite eliminar las impurezas, al que seguirá una fase de secado y centrifugado. Un proceso mecánico homogeneiza el color y textura.
- Producción de un nuevo envase o producto con forma y color a partir de una nueva fase de depuración del material. Ciclo de superación de los controles de calidad.
Para que esto sea posible, nunca deben abandonarse los residuos en lugares no preparados para ello.
Biblox considera imprescindible cumplir siempre con la normativa vigente, apostar por el desarrollo de productos reciclados e impulsar todas las acciones posibles para mejorar la sostenibilidad del sector.