Las ventajas del PET termoformado para el envasado alimentario
29 de abril de 2024 | Por: Biblox
Categorias:
En la sociedad contemporánea, el plástico es un componente intrínseco de nuestra vida cotidiana, y su eliminación requeriría un cambio radical en nuestro estilo de vida, y la renuncia a numerosas comodidades modernas.
Esta cuasi inevitabilidad del uso de plástico no implica un descuido en su uso: en el actual contexto de la búsqueda de la sostenibilidad, el envasado de alimentos ha surgido como un área de actuación prioritaria para las marcas.
En el sector alimentario, los plásticos termoformados desempeñan un papel crucial en la comercialización de alimentos. Según Euromonitor, el uso de bandejas alimentarias está experimentando un crecimiento del 5% anual en Europa, y en Cataluña el número de bandejas ha aumentado en más del 70% en dos años: de 238 millones en 2018 a más de 406 millones en 2020, según la ARC.
Entre los materiales termoformado de uso alimentario, el PET destaca como el más idóneo por diversas razones:
- Sostenibilidad ambiental
El PET puede ser reutilizado y reciclado varias veces sin perder sus propiedades fundamentales, lo que contribuye significativamente a la reducción de desechos plásticos y al fomento de una economía circular en la industria alimentaria.
Además, el proceso de termoformado utiliza menos energía en comparación con otros métodos de fabricación de envases, lo que reduce la huella de carbono asociada con la producción de envases.
- Seguridad alimentaria
El PET es inocuo y puede estar en contacto directo con el alimento al no producir migración alguna al producto, y se le considera idóneo para este tipo de envasado.
- Transparencia y personalización
Su alta transparencia proporciona una visualización clara de los alimentos envasados; además, por su facilidad en el termoformado se puede adaptar fácilmente en forma y tamaño, facilitando la flexibilidad e innovación en el diseño del envase y reduciendo también la cantidad de material por su alta rigidez.
- Propiedades barrera
El PET proporciona una barrera efectiva contra la humedad, el oxígeno y el CO2, preservando la frescura y cualidades organolépticas del producto envasado, incrementando su vida útil y reduciendo el desperdicio alimentario.
- Eficiencia de coste
Su ligereza reduce el coste de transporte (y la huella medioambiental derivada), y la eficiencia del proceso de termoformado permite una producción rápida y a gran escala del coste energético.
- Resistencia y durabilidad
Garantiza una robusta protección física durante el envasado y transporte de productos, minimizando potenciales daños y roturas de envases previniendo extra costes y desperdicio de alimentos.
El PET termoformado es una alternativa innovadora y sostenible que ofrece múltiples beneficios para la industria alimentaria. En la medida que la industria busca cada vez más formas de reducir su impacto ambiental y mejorar la seguridad y calidad de los alimentos, el PET termoformado está desempeñando un papel crucial en el futuro del envasado alimentario.